EL FUTURO DE LOS ESMALTADOS.

1.Desinfectar tanto las manos del profesional como las de la clienta. Empujar hacia atrás la cutícula para quitar cualquier imperfección de la superficie de la uña y del área de la cutícula.
2. Formar el borde de la uña natural empleando la lima 180/180.
3. Retirar con cuidado el brillo natural de la uña con el lado 180 de la lima 100/180 para un efecto regulador.
4. Frotar las uñas con el limpiador Cleanser y la ayuda de un paño sin pelusas, haciendo especial hincapié en la zona de la cutícula y en los laterales de la uña.
5. Aplicar Colour Gloss pH Nail Prep en toda la superficie de la uña.
6. Aplicar Bonding Gel, para la doble misión de proteger la uña y servir de base para el color, en una capa ligera. Prestar especial atención en sellar las uñas.
7. Colocar la mano en la lámpara led (dotada de sensores automáticos y que no precisa activación manual) durante 10 segundos o durante 1 minuto en una lámpara UV tradicional.
Nota: en caso de utilizar Building Gel para darle una mejor forma a la uña, aplicarlo ahora.
Colocar la mano en la lámpara led durante 30 segundos o durante 2 minutos en una lámpara
UV tradicional.
8. Aplicar en forma de capa ligera el color escogido de Soak Off Color (38 tonos disponibles),
asegurando sellar bien las puntas.
9. Colocar la mano en la lámpara led durante 30 segundos o durante 2 minutos en una lámpara
UV tradicional. Para una mayor cobertura, repetir los pasos 8 y 9. También es posible jugar con dos tonalidades para crear nuevos y sorprendentes colores.
10. Aplicar Glossing Gel en una ligera capa.
11. Colocar la mano en la lámpara led durante 20 segundos o durante 1 minuto en una lámpara
UV tradicional.
12. Frotar suavemente con un paño la capa de adhesivo con el limpiador Cleanser.

Este evolucionado mundo sigue en auge y cada vez encontramos más casas ofreciéndonos estos productos. En mi caso utilizo la casa Gelac http://anitanails.com/gel-ibd/343-ibd-gelac.html y cuatro de los principales colores, por supuesto entre ellos la manicura francesa que ocupa el 75% de mi clientela.
Si no habéis probado la manicura semipermanente os animo a que lo hagais, quedareis sorprendidas de poder salir de vuestro salón sin miedo a meter la mano en el monedero para pagar.